Te echo de menos... te quiero.... no puedo olvidarte... no tengo consuelo... te sigo echando de menos...
Te espero.... ven a mi.... rompe los siencios... te espero
jueves, 20 de diciembre de 2012
martes, 11 de diciembre de 2012
Hoy hace un año....
Hoy, hace un año... el peor momento de mi vida sucedió tal día como hoy, hace un año...
Ese día lo pasé en casa de los llalos maternos, estaba sola, me refiero a que papá trabajaba... a medio día, después de comer, empecé a notar unos movimientos extraños, no sabía que era, era como si tu te movieras muy fuerte, con todo el cuerpo... empecé a darme cuenta que se hacía regular, pero... maldita sea!!! se suponía que las contracciones dolían!! pero no, seas no dolían, eran tan suabes como tus preciosos movimientos, aquellos que aprendí a adorar....
Esperé a papá y nos fuimos a casa, no sabía que hacer, al final papá me convenció, porque yo no notaba nada más raro que esos movimientos, que eran un poco constantes y otro poco no... al día siguiente teníamos monitores, podía esperar... pero papá decidió que fueramos al hospital...
Yo tenía vergüenza, como siempre, no quería molestar si no era nada, llegamos al hospital, no quise sacar tu maleta ni la mía, pensaba que nos volveríamos a casa, que no había llegado aún el momento.... pero el celador de entrada nos dijo que no me preocupara, que ya nacerias y que yo no molestaría... llamaron a la matrona y vino en poco tiempo... mientras venía le dije a papá... "quien nos iba a decir que nos veríamos en estas?" me refería a que nunca podría haber soñado un momento mejor en nuestras vidas... verte nacer....
Le dije a la matrona que no te había sentido y por eso veníamos, pero era mentira, yo no lo pensaba, era mi forma de justificar que la hubieramos molestado un domingo... mamá como siempre.... ella me contestó que por qué no habíamos ido antes y en ése momento temblé, pero se me pasó, no era verdad, solo lo había dicho para justificar que estuvieramos allí, no te podía pasar nada, tu estabas bien... trajo un monitor y me lo puso, no se oía tu latido, estuvo un tiempo buscando, yo estaba tranquila, no podía ser que no estuvieras allí conmigo... ignorante de todo lo que pasaba le dije si habían contracciones, quería que las hubiera, quería que nacieras ya, entonces ella dijo que era lo que menos le preocupaba, y eso si me aterró, entonces comencé a comprender.... no podía creerlo, pero empecé a darme cuenta de que algo no iba bien.... tenía miedo, ¿qué había hecho? miré a tu padre, le pedí perdón, ví como él cambiaba el gesto, él ya hacía tiempo que se había dado cuenta de lo que estaba pasando, yo no.... entonces la certeza me invadió, lo supe, ya no estabas... miré a tu padre, no sabía cómo pedirle que me perdonara por perder a su hijo, cómo rogarle que no me dejara, que debíamos volver a traerte, ya sabía que no estabas....
Me bajaron al quirófano, después de que llegara el ginecólogo, dijo que te sacaría y veríamos que pasaba.... papá entró en el quirófano porque quiso, porque quería verte hijo mío, yo sabía que yo no podría hacerlo... yo lloraba en silencio, sólo quería salir de allí, en mi mente resonaba una frase... 40 semanas y 1 día... 40 semanas y 1 día.... abrieron y te sacaron, papá lloró, no podía ser, pero yo sí lo sabía, o tenía que hacerme a la idea.... sólo quería salir de allí, solo queria salir y volver contigo vivo.... entonces ese hombre, el anestesista dijo algo que creó confusión, pensaron que había latido tras su reanimación, lo pensó papá, pero yo lo había odio bien, no había latdo, eso es lo que dijo.... no había vida... sin embargo, en ése momento en que a tu padre se le iluminaron los ojos pensando que estabas vivo, entonces caí, pensé que podría cambiar mi vida por la tuya, y en secreto, solo entre Dios y yo, le pedí que me cambiara por tí, le pedí que me llevara a mi y no a ti.... pero ya te habías ido.... y yo sólo quería salir de allí y volver contigo vivo...
No pude verte, me convencí a mi misma de que era lo mejor, lo decía en voz baja y en voz alta.... cuando salimos de ese quirófano solo supe decir gracias... yo no quería morir, tenía que volver a para darte la vida.... vi a tus abuelos, maternos y paternos.... el silencio de la habitación era tu partida, y la oscuridad tu luto.... jamás olvidaré esas horas... ahora ya hace un año, pero jamás olvidaré aquellas aterradoras horas en que supe que era cierto, que habían pasado 40 semanas y un día contigo y te había perdido...
Hice muchas cosas mal los días después, tuvimos que tomar muchas decisiones en momentos en que una persona no puede ni sabe decidir... todo mi mundo estaba destrozado y pensé que quizá solo estaríamos papá y yo.... te perdi y me perdí en aquella habitación, no supe ser tu madre por esos moemtnos y eso siempre me perseguirá... pero quiero pensar que algo más grande debía hacer, que debía devolverte la vida y sólo eso pudo hacer que me levantara de esa cama, que saliera de ese hospital, que volviera a la vida y entonces pudiera devolverte a ti la tuya..... y ahora, un año después, sigo esperándote, a ti otra vez... la vida me regala esta nueva oportunidad y no podemos dejar que se escape.... te quiero tanto hijo mío.... te quiero tanto....
Miedo tiene la gente de que él te sustituya, pero yo sé que no es así, tú estás por encima de todo y ya no temo la muerte, sé que al otro lado estás tú y pediré perdón una y mil veces y dejaré que cuando me mires lo hagas al principio con un reproche, pero después perdóname y ven a abrazarme, deja que te bese como no pude ése día, regálame tu eternidad y yo te prometo que jamás se perderán tus 40 semanas y un día que viviste dentro de mi vientre, nunca se irán de mi mente ni de la de tu padre....
Te quiero hijo mío.... y ahora te sigo esperando...
Ese día lo pasé en casa de los llalos maternos, estaba sola, me refiero a que papá trabajaba... a medio día, después de comer, empecé a notar unos movimientos extraños, no sabía que era, era como si tu te movieras muy fuerte, con todo el cuerpo... empecé a darme cuenta que se hacía regular, pero... maldita sea!!! se suponía que las contracciones dolían!! pero no, seas no dolían, eran tan suabes como tus preciosos movimientos, aquellos que aprendí a adorar....
Esperé a papá y nos fuimos a casa, no sabía que hacer, al final papá me convenció, porque yo no notaba nada más raro que esos movimientos, que eran un poco constantes y otro poco no... al día siguiente teníamos monitores, podía esperar... pero papá decidió que fueramos al hospital...
Yo tenía vergüenza, como siempre, no quería molestar si no era nada, llegamos al hospital, no quise sacar tu maleta ni la mía, pensaba que nos volveríamos a casa, que no había llegado aún el momento.... pero el celador de entrada nos dijo que no me preocupara, que ya nacerias y que yo no molestaría... llamaron a la matrona y vino en poco tiempo... mientras venía le dije a papá... "quien nos iba a decir que nos veríamos en estas?" me refería a que nunca podría haber soñado un momento mejor en nuestras vidas... verte nacer....
Le dije a la matrona que no te había sentido y por eso veníamos, pero era mentira, yo no lo pensaba, era mi forma de justificar que la hubieramos molestado un domingo... mamá como siempre.... ella me contestó que por qué no habíamos ido antes y en ése momento temblé, pero se me pasó, no era verdad, solo lo había dicho para justificar que estuvieramos allí, no te podía pasar nada, tu estabas bien... trajo un monitor y me lo puso, no se oía tu latido, estuvo un tiempo buscando, yo estaba tranquila, no podía ser que no estuvieras allí conmigo... ignorante de todo lo que pasaba le dije si habían contracciones, quería que las hubiera, quería que nacieras ya, entonces ella dijo que era lo que menos le preocupaba, y eso si me aterró, entonces comencé a comprender.... no podía creerlo, pero empecé a darme cuenta de que algo no iba bien.... tenía miedo, ¿qué había hecho? miré a tu padre, le pedí perdón, ví como él cambiaba el gesto, él ya hacía tiempo que se había dado cuenta de lo que estaba pasando, yo no.... entonces la certeza me invadió, lo supe, ya no estabas... miré a tu padre, no sabía cómo pedirle que me perdonara por perder a su hijo, cómo rogarle que no me dejara, que debíamos volver a traerte, ya sabía que no estabas....
Me bajaron al quirófano, después de que llegara el ginecólogo, dijo que te sacaría y veríamos que pasaba.... papá entró en el quirófano porque quiso, porque quería verte hijo mío, yo sabía que yo no podría hacerlo... yo lloraba en silencio, sólo quería salir de allí, en mi mente resonaba una frase... 40 semanas y 1 día... 40 semanas y 1 día.... abrieron y te sacaron, papá lloró, no podía ser, pero yo sí lo sabía, o tenía que hacerme a la idea.... sólo quería salir de allí, solo queria salir y volver contigo vivo.... entonces ese hombre, el anestesista dijo algo que creó confusión, pensaron que había latido tras su reanimación, lo pensó papá, pero yo lo había odio bien, no había latdo, eso es lo que dijo.... no había vida... sin embargo, en ése momento en que a tu padre se le iluminaron los ojos pensando que estabas vivo, entonces caí, pensé que podría cambiar mi vida por la tuya, y en secreto, solo entre Dios y yo, le pedí que me cambiara por tí, le pedí que me llevara a mi y no a ti.... pero ya te habías ido.... y yo sólo quería salir de allí y volver contigo vivo...
No pude verte, me convencí a mi misma de que era lo mejor, lo decía en voz baja y en voz alta.... cuando salimos de ese quirófano solo supe decir gracias... yo no quería morir, tenía que volver a para darte la vida.... vi a tus abuelos, maternos y paternos.... el silencio de la habitación era tu partida, y la oscuridad tu luto.... jamás olvidaré esas horas... ahora ya hace un año, pero jamás olvidaré aquellas aterradoras horas en que supe que era cierto, que habían pasado 40 semanas y un día contigo y te había perdido...
Hice muchas cosas mal los días después, tuvimos que tomar muchas decisiones en momentos en que una persona no puede ni sabe decidir... todo mi mundo estaba destrozado y pensé que quizá solo estaríamos papá y yo.... te perdi y me perdí en aquella habitación, no supe ser tu madre por esos moemtnos y eso siempre me perseguirá... pero quiero pensar que algo más grande debía hacer, que debía devolverte la vida y sólo eso pudo hacer que me levantara de esa cama, que saliera de ese hospital, que volviera a la vida y entonces pudiera devolverte a ti la tuya..... y ahora, un año después, sigo esperándote, a ti otra vez... la vida me regala esta nueva oportunidad y no podemos dejar que se escape.... te quiero tanto hijo mío.... te quiero tanto....
Miedo tiene la gente de que él te sustituya, pero yo sé que no es así, tú estás por encima de todo y ya no temo la muerte, sé que al otro lado estás tú y pediré perdón una y mil veces y dejaré que cuando me mires lo hagas al principio con un reproche, pero después perdóname y ven a abrazarme, deja que te bese como no pude ése día, regálame tu eternidad y yo te prometo que jamás se perderán tus 40 semanas y un día que viviste dentro de mi vientre, nunca se irán de mi mente ni de la de tu padre....
Te quiero hijo mío.... y ahora te sigo esperando...
lunes, 10 de diciembre de 2012
Cómo, cuando, por qué...
Hace un año, tal día como hoy, cumplíamos nuestra semana 40 juntos.... mi alma y mi corazón te esperaban con todo mi amor, te sentían, o eso creía yo.... ¿Cómo? ¿Cuando? ¿Por qué?
No tengo respuestas a estas preguntas, después de un año me siento igual de indefensa y tengo miedo que las preguntas se repitan y te pido que vuelvas como lo hice hace un año y un día.... te pido que tengas fuerzas para volver por primera vez a mis brazos, porque tu alma se quedó dentro de mi vientre hace un año, y ahora sé que vuelves a estar ahí y también se ha convertido en carne y ya no dejará de latir....
Hace un año te esperaba... ahora te sigo esperando.... te quiero hijo mío, mi niño, mi niño chico....
No tengo respuestas a estas preguntas, después de un año me siento igual de indefensa y tengo miedo que las preguntas se repitan y te pido que vuelvas como lo hice hace un año y un día.... te pido que tengas fuerzas para volver por primera vez a mis brazos, porque tu alma se quedó dentro de mi vientre hace un año, y ahora sé que vuelves a estar ahí y también se ha convertido en carne y ya no dejará de latir....
Hace un año te esperaba... ahora te sigo esperando.... te quiero hijo mío, mi niño, mi niño chico....
viernes, 7 de diciembre de 2012
Fuego en los ojos...
No sé qué decirte.... te tengo constantemente en la mente, en el corazón.... no sé qué decirte....
No sé qué decirte.... te tengo en mi alma, en mi vientre, siempre en el pensamiento, no sé qué decirte....
Queda poco para que se cumpla un año, el primer año.... tu primer año.... Esos primeros momentos que ya han pasado, todos, los he tenido que vivir sin ti.... sólo queda uno, queda el más temido, queda el más esperado, queda el que más necesito.... queda tu cumpleaños, queda tu primer año lejos de mi, o tan cerca, no lo sé.... quizá un día alguien tuvo razón..... quizá nunca nadie estuvo más cerca de mi, pero a veces te siento tan lejos.... sabía que estabas allí, lo sabía, pero no pude, no pude..... te imaginaba, te veía en mi mente, pero no pude, no pude....
No sé qué decirte.... no sé si algún día podré perdonarme, no creo que nunca pueda hacerlo, sé que tú ya lo has hecho, sé que tu lo hiciste sólo porque te lo pedí, pero no querías perdonarme porque sé que nunca me lo tuviste en cuenta.... Te quiero hijo, sé que es un secreto, sé que estás conmigo, pero yo te quiero y en el fondo nunca será igual....
Te quiero hijo, no te vayas, quédate conmigo, quédate para el resto de mi vida y sigue esperandome allá en el cielo, te quiero hijo, vuelve por primera vez a mis brazos, yo te estoy esperando... Te quiero hijo mío, mi niño, mi niño chico....
No sé qué decirte.... te tengo en mi alma, en mi vientre, siempre en el pensamiento, no sé qué decirte....
Queda poco para que se cumpla un año, el primer año.... tu primer año.... Esos primeros momentos que ya han pasado, todos, los he tenido que vivir sin ti.... sólo queda uno, queda el más temido, queda el más esperado, queda el que más necesito.... queda tu cumpleaños, queda tu primer año lejos de mi, o tan cerca, no lo sé.... quizá un día alguien tuvo razón..... quizá nunca nadie estuvo más cerca de mi, pero a veces te siento tan lejos.... sabía que estabas allí, lo sabía, pero no pude, no pude..... te imaginaba, te veía en mi mente, pero no pude, no pude....
No sé qué decirte.... no sé si algún día podré perdonarme, no creo que nunca pueda hacerlo, sé que tú ya lo has hecho, sé que tu lo hiciste sólo porque te lo pedí, pero no querías perdonarme porque sé que nunca me lo tuviste en cuenta.... Te quiero hijo, sé que es un secreto, sé que estás conmigo, pero yo te quiero y en el fondo nunca será igual....
Te quiero hijo, no te vayas, quédate conmigo, quédate para el resto de mi vida y sigue esperandome allá en el cielo, te quiero hijo, vuelve por primera vez a mis brazos, yo te estoy esperando... Te quiero hijo mío, mi niño, mi niño chico....
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